martes, 17 de febrero de 2009

Los nuevos fantasmas de siempre

Cuando el más recóndito rincón del globo terrestre ha sido conquistado técnicamente y explotado econonómicamente, cuando cualquier suceso, en el lugar y tiempo que sea, se ha hecho accesible con la rapidez que se quiera, cuando tiempo significa solamente velocidad, instantaneidad y simultaneidad, desapareciendo el tiempo como historia de toda existencia de cualquier pueblo, cuando el boxeador pasa a ser la gran figura de un pueblo, cuando el número millonario de las masas congregadas significa un triunfo, entonces, por encima de todo este aquelarre, sigue imponiéndose como un fantasma la pregunta: ¿para qué?, ¿adónde?, ¿y luego qué?

Martin Heidegger, Introducción a la Metafísica

No hay comentarios:

Publicar un comentario