viernes, 7 de junio de 2019

07/06/2019

Como has puesto un póster del dirty Sonic Youth en el salón de tu casa, maldito hipster, has vuelto a escuchar ese tremendo discazo y te has acordado de la época en que un amigo y tú en cierto bar siempre pedíais la canción Nic Fit, que solo dura cincuenta y nueve segundos, y saltábais y aullábais como putos trastornados, a altas horas de la noche, completamente borrachos. Después has escuchado la canción Washing Machine, del disco homónimo —otro tremendísimo discazo, dicho sea de paso— nueve minutos y medio de pura magia sónica, y las has puesto en bucle, una y otra vez, y has abierto una cerveza y encendido un cigarrillo (no deberías, pero has vuelto a fumar a diario).  

No hay comentarios:

Publicar un comentario