sábado, 10 de noviembre de 2012
La sonrisa sórdida del capital
Pincho en un enlace titulado Hacia una revolución molecular, de William Burroughs, y leo el texto y me parece bien, y me digo sí, luchemos en la calle por este mundo, y me encuentro, justo debajo del texto, con un montón de anuncios que prometen más de setecientas marcas de zapatos, más de treinta mil modelos, y anuncios de Converse, Reebok, Adidas, Kawasaki, Bensimon, New balance, Ascis, entrega gratuita. El texto está etiquetado Bajo control. La intención del blog es desbaratar al acrítico hombre masa.
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Solo nos queda la imaginación.
ResponderEliminar"Concibo el mundo de un modo que podría calificarse de cruel y darwinista, pero al mismo tiempo mediado por un idealismo real y el entusiasmo en las posibilidades del intelecto y de la imaginación para lidiar con este entorno más o menos brutal"
ResponderEliminarJoyce Carol Oates
;)
ResponderEliminar¡Gracias!
Algunos quieren luchar en la calle por este mundo, otros pasan de calle y de mundo y ponen las marcas a dialogar unas con otras entre líneas, en fin... cada loco con su tema.
ResponderEliminarEl mundo se descompone en hechos...
ResponderEliminarEs curioso lo que dices. Mi novela favorita es una especie de testimonio de cómo se forman los hechos y de pq no se puede creer en ellos. Brandys clavó la reflexión cuando escribió Rondo, imho.
ResponderEliminarNo conocía esa novela, ni al autor. Suena bien.
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