miércoles, 20 de mayo de 2015
Perder el tiempo es un arte, como todo
Y yo, por desgracia, lo hago excepcionalmente bien. Cualquier artículo chorra atrae mi atención igual que la luz artificial atrae a las polillas. He estado leyendo, por ejemplo, artículos sobre los fofisanos, un tema que no solo no me interesa lo más mínimo sino que incluso me da algo de grima, y no tanto por los fofisanos en sí, que sencillamente me son indiferentes, como por esa horripilante palabra: fofisanos. La palabra más fea de la historia de la lengua española. Deplorable. Todos los fofisanos deberían ir al gimnasio y eliminar toda su grasa corporal solo para lograr que la palabra, al carecer de referente, dejara de usarse.
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Why Movies Just Don't Feel "Real" Anymore
Menuda clase maestra de Estética y Filosofía de la Percepción PD: Observen las imágenes de las películas de Terrence Malick, el mayor genio ...
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¡Esto sí que es empoderamiento! Degustemos las palabras de la gran Danerys en Valyrio, su lengua materna: Dovaogēdys! Naejot memēbāt...
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Ni «espíritu de sacrificio», ni «afán de superación», ni «aspiración a la excelencia». Ni ningún respeto o simpatía por tales cosas.
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