martes, 5 de mayo de 2009

La tierra no es un satélite artificial creado por seres extraterrestres

El viajero del espacio aterrizó asustado sobre el desierto de Sonora(1) y salió de su nave mirando hacia todas las direcciones. Los restos de la batalla entre La Tierra y los Platillos Volantes(2) yacían desperdigados aquí y allá(3). Se sintió solo. Se quitó su traje espacial y dejó que el mortal oxígeno acabara con su vida.

1. Este desierto se cita tres veces, a lo largo de las primeras 427 páginas de La Broma Infinita. Todavía no he leído más, así que quizás se cite más veces en total. La utilidad de este dato aparantemente es nula, pero podría, por ejemplo, ser la última pregunta de ¿Quieres ser millonario?

2. Película de ciencia-ficción no excesivamente interesante: vienen los Platillos Volantes, luchan contra la tierra. Cumple lo que promete, eso sí.

3. No es probable que los restos de la batalla acabaran en el desierto de Sonora. La batalla se libra entre los edificios emblemáticos de EEUU, que quedan destruidos: el mayor atractivo de la película son los efectos especiales terriblemente desfasados, para quien guste de esa delicatesen retro, claro. Hay quien opina que la amenaza de los extraterrestres destructores en este tipo de películas representa la paranoia anti-comunista de los estadounidenses durante la guerra fría. Es posible. Respecto a esta lectura, señalamos que un significativo porcentaje de personas(a) contestan que si la Tierra Media fuese Europa, Mordor sería Rusia.

a. Hasta el presente, y que sepamos, a este tipo de preguntas sólo responden personas (y no todas)

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