sábado, 2 de diciembre de 2017

En cuanto a la cuestión de la seducción

En cuanto a la cuestión de la seducción, sí, la escritura es siempre el lugar de una seducción posible. Y ¿qué es seducir? Seducir es prometer alguna cosa —un sentido por ejemplo, o un objeto, o una persona— que no se da como presencia.
Jacques Derrida, No escribo sin luz artificial

3 comentarios:

  1. Seducir es prometer alguna cosa.. Nunca lo había visto así... Supongo que prometer, pero nunca dar, ¿no? Mantener la expectativa todo el tiempo posible hasta que el burro se abalanza sobre la zanahoria metafórica y nos toque buscarnos otra...

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  2. Sí, Derrida dice un poco más adelante: «Es preciso que exista ocultamiento y promesa; y elipsis de algo que no se presenta... Así pues, la escritura es justamente esa experiencia de no presentación. La escritura no se hace nunca presente, y cuando se presenta es siempre para anunciar alguna cosa que no está aquí». Yo diría (heideggerianamente) que ese algo que no se presenta no es un ente, una cosa. No puede darse, hacerse presente. Supongo que es lo que Beckett llamó Godot.

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  3. «La distancia es el alma de lo bello», Simone Weil.

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