cuando la chica azul bailaba
sobre las ruinas del mundo
yo estaba borracho y era de noche
y el resplandor de su mirada
incendiaba el vuelo de los pájaros
sus ojos eran pasadizo y temblor
no era fácil atravesar su fulgor
y yo me quedé esperando para siempre
en el frío umbral de la noche
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