El primer impulso de cada persona consiste en afirmarse y desarrollarse. El segundo impulso consiste en salir de sí misma, en corregir su provincianismo y curar su soledad. Esto último es lo que hacemos cuando amamos a alguien, cuando realizamos un acto moral o cognoscitivo y cuando recibimos una obra de arte. Sin duda este proceso puede interpretarse como una ampliación o como una momentánea aniquilación de la propia identidad. Pero se trata de una vieja paradoja: «el que pierde su vida la salvará».C. S. Lewis
viernes, 25 de enero de 2019
El que pierde su vida la salvará
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Why Movies Just Don't Feel "Real" Anymore
Menuda clase maestra de Estética y Filosofía de la Percepción PD: Observen las imágenes de las películas de Terrence Malick, el mayor genio ...
-
¡Esto sí que es empoderamiento! Degustemos las palabras de la gran Danerys en Valyrio, su lengua materna: Dovaogēdys! Naejot memēbāt...
-
Ni «espíritu de sacrificio», ni «afán de superación», ni «aspiración a la excelencia». Ni ningún respeto o simpatía por tales cosas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario