A continuación, tres canciones sobre la juventud, esa cosa que la obra de Bolaño exalta y rodea de una aura mítica. Aunque he de decir que cuando yo tenía veinte años estaba bastante cuerdo (según mi criterio).
Si no podemos con la nostalgia, lancémonos a sus cálidos, febriles, acogedores brazos hechos de bruma y de viento.
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