miércoles, 25 de noviembre de 2015

El melodrama matemático/cibernético



Los casos de grandes matemáticos con enfermedades mentales tienen enorme resonancia para los escritores y cineastas de la época pop. Esto tiene que ver principalmente con las ideas preconcebidas y las sensibilidades de esos mismos escritores/cineastas, y a su vez dichas ideas están en función de lo que se podría llamar molde arquetípico particular de nuestra época. No hace falta decir que dichos moldes cambian con el tiempo. Hoy, el Matemático Mentalmente Enfermo parece ser de algún modo lo que el Caballero Errante, el Santo Mortificado, el Artista Atormentado y el Científico Loco fueron en otras épocas: algo así como nuestro Prometeo, el que va a lugares prohibidos y vuelve con regalos que todos podemos aprovechar pero cuyo precio solo paga él.
David Foster Wallace, Todo y más: breve historia del infinito 

El patrón alegórico propio del melodrama matemático parece ser más clásicamente trágico y tiene en su héroe a una especie de figura prometeica-icariana cuya genialidad para elevarse a grandes alturas también es una hybris y un Deseo Fatídico.
David Foster Wallace, La retórica y el melodrama matemático

martes, 24 de noviembre de 2015

Regla de oro libresca

No comprarás más libros hasta que te hayas leído las adquisiciones más recientes. Pongamos que recientes significa las de los últimos tres meses.

PD: Es una regla de oro un tanto absurda, pero alguna regla hay que tener, porque si no cundiría el pánico, la anarquía, la anomia. Los límites son necesarios.

PD2: La Biblioteca pública de León ha tenido a bien adquirir El cuaderno perdido, de Evan Dara, libro que amablemente les sugerí que compraran, pero no puedo cogerlo prestado porque estoy multado. Total, que soy un usuario calamitoso y no voy a poder leer el libro hasta el 15 de enero.

Neo, la providencia divina y los futuros inciertos


¿Y cómo puede Dios prever los futuros inciertos?
Boecio, La consolación de la filosofía 

lunes, 23 de noviembre de 2015

El tornillo ausente

A mí —he puesto el lema De nobis ipsis silemus como subtítulo del blog con la única intención de transgredirlo, según parece, aunque en un principio fue para que Kant, quien lo puso en su Crítica de la razón pura, me irradiara mágicamente algunas migajas de su portentosa inteligencia, y porque la escritura egocéntrica es una plaga en nuestro tiempo— debe de faltarme un tornillo: siempre que veo concitarse la ira y el odio alrededor de un pensador, inmediatamente siento hacia él una simpatía y un interés extremos.

Mi daimon interior me exige llevar la contraria sistemáticamente —incluso me exige, el muy insaciable, llevarme la contraria a mí mismo, lo que tal vez implique algún tipo de paradoja o de bucle infernal en el que de momento es mejor no pensar (respecto de los bucles y estas cosas, al hilo del libro Gödel, Escher, Bach, se me ha ocurrido que una buena imagen del pensamiento, de la Filosofía, sería la  FIGURA-FIGURA, de Scott E. Kim, dado que la Filosofía trata de hacer explícito lo implícito, es decir, de traer el fondo al primer plano, motivo por el cual, dicho sea de paso y con la intención de ir acabando ya este largo paréntesis, la filosofía es inherentemente recursiva y hable de lo que hable termina hablando, sobre todo, del hablar mismo*)—.

Me pasó con Feyerabend, a quien según una profesora que tuve había que darle de comer aparte. Según yo, Feyerabend, para empezar, sabía más de Física que todos los tuercebotas que estábamos en aquella clase, incluida la profesora en cuestión —la soberbia intelectual de los estudiantes de Filosofía tiende al infinito, pero sus conocimientos sobre Física suelen ser, salvo excepciones, paupérrimos—. 

Me pasó con Derrida, quien, por lo demás, es un genio y un escritor soberbio, el James Joyce de la Filosofía.

Me ha pasado con Bruno Latour. 

And son on...

*Espero que se haya entendido algo.


domingo, 22 de noviembre de 2015

El sentido del sacrificio es el sacrificio del sentido

Sirva este quiasmático y metafísico título como "explicación" de la extraordinaria película de Tarkovsky.

Lo he robado de AQUÍ.


viernes, 20 de noviembre de 2015

jueves, 19 de noviembre de 2015

Mi top 5 peliculero definitivo

1. 2001, una odisea del espacio
2. El árbol de la vida
3. Pi, fe en el caos
4. El séptimo sello
5. El evangelio según San Mateo

PD: Y luego ya todas las películas del inefable Nicolas Cage, el histrión más maravilloso que ha habido nunca y al cual en este blog se le idolatra.

Dios en la Biblia

AQUÍ.

Un Dios que concebimos no es dios
Gerhard Tersteegen

A-WA - Ismer Ma Al Gat

martes, 17 de noviembre de 2015

Series de infancia

Como llevo todo el día hablando del ISIS, de Al-Qaeda, de las YPJ —¡viva la resistencia de las mujeres kurdas!—, de la venta de armas por parte del gobierno francés —y de España— a Arabia Saudí, de la (no tan) lejana guerra de Afganistán, de las olvidadas víctimas de Yemen, el país más pobre de Oriente Medio, de la persecución religiosa que sufren las musulmanas cuando el laicismo mal entendido se vuelve (también) una ideología intolerante y fanática y criminaliza una religión, lo que me parece una abyección moral, por cuanto en lugar de dejar ser al otro un otro se le obliga a que sea como nosotros, y de mil cosas más —creo haber hablado sobre la época del terror jacobino, aprovechando que ensalzamos tanto la revolución francesa y que nos olvidamos de las miles de personas que pasaron por la guillotina, nada de lo cual impide, obviamente, que lamente y condene la muerte de los inocentes—, hasta el punto de haberme aburrido soberanamente a mí mismo sin haberme aclarado, para más inri, lo más mínimo sobre la compleja situación actual, ahora necesito regresar a la dorada, añorada, idealizada infancia, a esa época en la que la felicidad consistía en sentarse delante del televisor a ver Campeones y en la que no sabíamos nada de geopolítica, odio, miedo, sangre y horror. Un pequeño paréntesis para el recuerdo y la nostalgia. Sigan el enlace.

Las series que marcaron nuestra juventud.

domingo, 15 de noviembre de 2015

Sobre la amenaza yihadista

En lugar de opinar de lo que no sé, como es costumbre en España, prefiero cederle la palabra a Fernando Reinares y enlazar sus artículos para El País. AQUÍ están.

viernes, 13 de noviembre de 2015

¿Me contradigo otra vez?

Primero pongo el irónico vídeo de Los Nikis que se mofa de la idea de España en cuanto imperio católico universal, y a continuación el texto de Gustavo Bueno. ¿Me contradigo otra vez? Yo diría que sí. ¿Por qué? Sencillamente porque hay que pensar las cosas desde puntos de vista enfrentados. La guerra (pólemos), dijo un viejo y oscuro filósofo griego, es el padre de todas las cosas.

jueves, 12 de noviembre de 2015

Gustavo Bueno - España

AQUÍ.

A Gustavo Bueno a veces se le va la olla, pero es, indudablemente, el mejor filósofo español de los últimos tiempos (y perdón por la ambigüedad de esta expresión, y por no argumentar mi categórico aserto).

Los Nikis - El Imperio Contraataca

España está en franca decadencia desde que dejamos de ser «un pueblo de teólogos armados» y el, por así decirlo, volkgeist castizo dejó de recorrer con su furia ultracatólica la península ibérica. Ni judíos que expulsar, ni una Granada musulmana que conquistar, ni una herejía protestante que combatir. Así no hay manera.

miércoles, 11 de noviembre de 2015

Los dejados

Qué bien me caen las sectas cristianas que no solo no valoran nada la voluntad sino que directamente la condenan, como los iluminados, alumbrados o dejados (este nombre me chifla). Me parecen los anti-nietzscheanos avant la lettre más radicales que ha habido, y por eso me gustan tanto (cada vez le tengo más tirria al pesado de Nietzsche).

PD: Esta admiración mía por una secta que, en última instancia, estaría más cerca del protestantismo que del catolicismo español de toda la vida (ya en nombre del catolicismo nos opusimos con fervor al arrianismo, por ejemplo) tal vez se contradiga con el anterior post en el que me refería a la catástrofe que hubiese supuesto para el arte la adopción del protestantismo (sobre esta cuestión habló Buñuel, por cierto, el mejor cineasta español de todos los tiempos, presunto ateo y, como muestran sus películas, un católico redomado) y aludía despectivamente al recogimiento interior como una especie de "gaita luterana", en el sentido de algo molesto y fastidioso. Lo único que puedo decir es que, efectivamente, me contradigo a menudo, lo cual no está nada bien, lo sé. Pero prometo que algún día intentaré escribir en serio*.

*Prometo intentarlo. Si luego, habiéndolo intentado, me aburro y salen más majaderías, eso ya no será culpa mía

lunes, 9 de noviembre de 2015

La segunda trilogía de Star Wars

AQUÍ y AQUÍ.

Poco más que añadir. El sábado estuvimos viendo la segunda trilogía de Star Wars y comprobamos que era tan delirantemente mala como la recordábamos. Creo que lo mejor es fingir que esas abominables películas no existen.

viernes, 6 de noviembre de 2015

San Jerónimo


San Jerónimo no solo fue el traductor de la Vulgata, también fue el autor de lo que puede considerarse la primera bibliografía de bibliografías, su De viris illustribus. Es muy posible que este dato no les interese una mierda, pero ahí lo dejo.

PD: A modo de observación provocadora: piensen en la tremenda desgracia que hubiese sido para el arte que España e Italia hubiesen sucumbido a la herejía protestante. Ni barroco ni nada, todo meditación interior y gaitas luteranas. Horroroso.

miércoles, 4 de noviembre de 2015

La era Kase.O

Kase.O es el mejor poeta español de los últimos veinte años. Si alguien no me cree, estoy dispuesto a analizar las rimas, los encabalgamientos léxicos, la mezcla de registros cultos y vulgares, las intertextualidades, los paralelismos estructurales, las similicadencias, aliteraciones, paranomasias y demás que Kase.O usa en sus letras con total maestría, pero preferiría que me creyérais sin más: soy un tío bastante vago.