jueves, 29 de abril de 2010

La Mala



Yo no practico el arrepentimiento (esto es plenamente espinozista y/o nietzscheano; nada cristiano)

viernes, 23 de abril de 2010

La poesía inútil del mundo

Un último cigarro para celebrar que el día está a punto de comenzar, y si miras para un lado todo es aún oscuridad y si miras para el otro el encantamiento auroral se posa en tu ojos con el fulgor del tigre del bosque, pero es mágica la simetría y si fueras capaz de caminar lo suficientemente deprisa vivirías siempre en ese estadio intermedio, ni de día ni de noche, eternidad del tigre y danza lentísima de los astros, cansancio en las piernas y los párpados pesados, dejándote llevar por la poesía inútil del mundo, que se despereza con un bostezo en forma de bóveda y estira los brazos y en la tristeza de su sonrisa yace la belleza que no significa nada y lo empapa todo...

jueves, 22 de abril de 2010

Referencias bíblicas en el pop contemporáneo: Tulsa



No tengo ninguna estúpida tabla de la Ley

Historias bíblicas en imágenes: erotismo y violencia, guerra y seduccion


Judith y Holofernes, Franz Von Stuck

El rebozado hermenéutico-publicitario

-No es lineal.
-Ya...
-¿No te das cuenta?
-Sí...
-¿No es súper revolucionario?
-Bueno...
-La narración explosiona fractalmente y fragmentos cuánticos articulados en red deconstruyen la novela decimonónica
-¿No jodas?
-Ahí es nada, chaval
-Deberías poner eso de los fractales en la contraportada...
-Sure

martes, 20 de abril de 2010

The Mindscape of Señor S: recomendamos tres cómics

Empecé a leer Watchmen de Alan Moore. En el documental/entrevista The Mindscape of Alan Moore habla de magia y de mecánica cuántica. Parece un loco o un iluminado. Con su melena, su barba, sus anillos. Celebritie de Muchachada Nui. En el documental dice que las acciones puras se realizan sin miedo y sin ambición. Una especie de salto. Hay que leer Watchmen.

También empecé a leer el Génesis, nada menos, ilustrado por Robert Crumb.
El otro día llamó por teléfono una testigo de Jehová y estuve como media hora hablando con ella, intentando convencerla de que, como decía House, si hablas a Dios estás rezando, pero que si Dios te habla a ti estás como una puta cabra y necesitas atención médica. Se sorprendió bastante. Le dije que la Biblia no era la palabra de Dios, sino palabras de hombres, como los mitos griegos, por ejemplo. Ella insistió en que los hombres habían escrito la Biblia, pero Dios dictaba. Los hombres habían actuado "como una secretaria" (sic). No puede reprimir mi asombro y preguntar si de verdad, sinceramente, en lo más profundo de su corazón, creía que había sido así. Dijo que sí, que era la palabra de Dios, el único Dios verdadero. Yo seguí con mi rollo, con un tono entre pedante e irónico que provoca risitas nerviosas por su parte. Solté de sopetón que Dios era causa inmanente, pero no transitiva, del mundo, como decía Spinoza, y que no tenía voluntad ni barba blanca ni nada. Aclarando sus ideas con unos ehhhhhhh temblorosos por fin dio con la solución: Dios es una criatura espiritual. Al oír la palabra "criatura" no cupe en mí de la falta de pericia teológica en alguien que llama para hablar, precisamente, de Dios. ¿Una criatura? No, testigo mía, no, las criaturas somos nosotros. Bueno, pero es espíritu. Le pregunté si estaba de acuerdo con la teología negativa, es decir, si pensaba que de Dios, al estar más allá de todas las categorías que usamos, incluso del ser, solo se podía hablar de forma negativa, en cuyo caso su afirmación anterior no tenía valor alguno, porque Dios no era. Dijo: ya... Y yo: si la Biblia está muy bien, es una buena colección de relatos fantásticos... ¿Fantásticos? Obvio.

Y, bueno, la cosa fue derivando hacia el origen de las leyes éticas, que ella creía venían escritas en nuestro interior (más vaguedades absurdas que no explican nada) y que todo iría mejor si nos guiáramos por las leyes, etc. Como las normas de tráfico (sic). ¿No creerá que Moisés escribió el código de circulación? No, claro. Era un símil, como lo de la secretaria. Yo creo que el origen de las leyes es pragmático, no trascendente, aclaré. Al final quedamos en que yo leería la Biblia y ella a Spinoza. Y hoy cumplí mi palabra: saqué el Génesis ilustrado por Robert Crumb de la biblioteca. El Génesis mola. Empieza con una explicación inmejorable (y fantástica) de lo que es un enunciado performativo: Dios dijo: hágase la luz; y hubo luz. Lo decía Alan Moore en el documental/entrevista mencionado: la magia tiene mucho que ver con el lenguaje, es influir sobre otras conciencias. Burroughs diría: es un virus. Un enunciado performativo en la escala humana no mágica sería algo menos espectacular, como decir "te prometo que...", en el momento de decirlo la acción de prometer queda realizada.

También saqué The Sandman: estación de tinieblas. Aparece Destino, uno de los Eternos, en un jardín de senderos que se bifurcan, y a continuación llegan tres viejas que supongo son Las Parcas, y dicen que todo tiene un principio y un final, algo muy suyo ya que una preside el nacimiento y otra la muerte. La otra, el matrimonio. Además tienen los hilos para tejer el destino de los mortales. Neil Gaiman también mola.

lunes, 19 de abril de 2010

Punk still alive!

Today, las Pistolas Sexuales: el encanto (sucio) de la decadencia, penúltimo refugio del dandismo. Por cierto Nietzsche ya fue Punk cuando dijo aquello de a lo que está cayendo es preciso empujarlo. También con su exhortación al do it yourself en forma de parricidio hermeneútico total que lo incluía, inevitablemente, a él mismo. Bien mirado, el do it yourself podemos retrotraerlo hasta la autonomía reivindicada por las éticas helenísticas. Tal vez. Todo está unido.









domingo, 18 de abril de 2010

Debajo

Debajo de tu cabeza
en el fondo imposible de la almohada
tras el murmullo de voces
que confluyen
en tu cabeza a la deriva por la oscuridad
el abismo

Alterados I

La conciencia psicoactivamente ampliada es capaz de percibir con desacostumbrada intensidad conceptos que transforma en intuiciones, de modo que realiza un gesto místico de comprensión omniabarcante y experimenta el eros platónico, definido en El banquete como vía alógica hacia lo absoluto. La condición tácita que regula el acceso a esta especie de gnosis patrocinada por el THC es la imposibilidad de ser explicada mediante un discurso racional, si acaso indicada poéticamente, nada más. La certeza de que lo descubierto no es prolongable a voluntad se vislumbra durante la experiencia misma, y se hace patente cuando la conciencia recobra su estado habitual. Lo descubierto, es decir, lo verdadero, no posee transitividad, por lo cual la pregunta qué es se vuelve absurda, no hay complemento directo posible. Se trata de un acontecimiento fulgurante e intransitivo, por decirlo de algún modo, cuyo grado de intensidad es inversamente proporcional a su duración. Intensidad máxima, duración mínima. Recuerdo confuso.

jueves, 15 de abril de 2010

El amor en las sitcom

-Te quiero
-Gracias

Los poemas no importan una mierda (metapoema hiper-romántico)

Los poemas no importan una mierda, dijo
con voz ronca y pupilas dilatadas,
ebrio de intensidades inefables,
brindando por la noche de verano
que invita a unirse con la naturaleza
-quiero decir, con la ciudad-,
al contrario que el invierno
donde el gozo se invierte y consiste
en sentirse separado,
(lo dice Proust al comienzo
de la búsqueda)
pero los poemas no importan una mierda,
poesía no eres tú (en todo caso,
singularidades pre-individuales)
ni las putas lunas rielando, dijo
es tumbarse bien borracho sobre la arena
como Rimbaud, y gritar
que la flores del ártico no existen,
la poesía es respirar su aroma
de modo que los poemas no importan
una mierda.

miércoles, 14 de abril de 2010

Repetición

Huele a humo y a primavera,
suena música electrónica,
alimento del espíritu, Zeitgeist,
los nuevos sonidos no progresan
ni autoconcluyen se expanden
en círculos concéntricos
repitiéndose al infinito eterno
retorno donde lo que retorna
es la diferencia -espasmo
deleuziano, duración
eterna del instante-



Cuando Leopoldo María Panero escribió que el sentido no es una figura del discurso aplaudimos desde la grada deleuziana gritando es un acontecimiento, es un acontecimiento, y no un "estado de cosas" sino aquello que, si bien puede no existir (nunca se sabe) no deja por ello de insistir, de repetir-se.

Dos poemas

1

Ojos inmensos
negros
pasadizo secreto
que tiembla
levemente
sus pies desnudos
cruzan
sin miedo
ya nunca
tendrá miedo



2

Escuché palabras
desperdigadas por el universo
más allá y más acá de las cosas
-espasmo patafísico-
y sonidos que no caben
en una canción
vagando libres sin peso
como cuerpos en movimiento
emancipados
de los pasos clásicos
habitando el espacio
tendiendo puentes
entre dimensiones

Una coriente en expansión
arrastrándolo todo
tiempo líquido
-let yourself go-
inventando el espacio:
donde había un yo ahora
solo habla el viento
y los lugares-que-no-existen
se estremecen de júbilo

martes, 13 de abril de 2010

Estética del bucle



En la noche 667 Sherezade volvió al principio de su narración y contó las primeras páginas del libro. En ese momento toda la historia -ella, el Rey, la realidad misma- quedó proyectada sobre el abismo de la recurrencia infinita

Bucle (loop): Movimiento recurrente y autorreferencial. / Reversión del presente sobre sí mismo. / Denegación de la temporalidad secuencial en favor de la actualidad iterativa. / Cinta de Moebius. / Giro y reanudación del movimiento.

Cualidades distintivas: La atracción fatal y la vivencia infernal. Looped in the loops of her hair: cuando Yeats se describía, en su poema Brown Penny, "atrapado en los bucles de su pelo", hablaba de una atracción invencible, abismal, que no da lugar a una historia de amor sino a un cierre de giro en la cinta. Vértigo de la seducción: el atributo principal del infierno no es el sufrimiento, sino la reiteración inútil.

Proyección del sujeto en bucle: Física (en las cintas deslizantes de las grandes superficies), visual (en los circuitos de videovigilancia), cronológica (en los ciclos de la moda y el revival), tecnológica (en los ritmos de renovación de la técnica), discursiva (en la codificación del lenguaje), afectiva (en los procesos de socialización determinados por la condiciones anteriores).

Eloy Fernández Porta, Homo Sampler: Tiempo y consumo en la Era Afterpop, págs. 196-197

La casa del ser

si el lenguaje es la casa del ser
el viento se ha llevado el tejado
y las palabras desguarecidas
parecen niñas perdidas
bajo la lluvia

lunes, 12 de abril de 2010

Nueve poemas

UNO

El ser resplandece
esparcido en sus infinitos modos
y las palabras mienten
y arañan impotentes
las paredes de su casa sin tejado
y llueve y hace frío
y pronto terminará el mundo:
la indigente casa del ser brilla
con aroma de ruinas del futuro
y ceniza y la tormenta
sublime que se avecina
pronto terminará con el mundo,
esplendor mudo de la nada,
lienzo de la casa del ser



DOS

Sonrisas desgajadas del cuerpo
brillan en la oscuridad
y cuerpo es todo lo que somos,
filigrana estampada
en la cara de la nada.



TRES

Tanto tiempo
he recorrido la ruta,
tanto tiempo preguntando
por qué es redonda la tierra,
dónde acaba el mar.

En los oscuros callejones
aún resuena
el fosforescente son
de tus pasos,
en la ruta que termina
en el comienzo
de la ruta
aún resuenan
tus pasos.

Tanto tiempo
ensimimado
con mi destino roto,
lo acariciaba
en el espejo:
Narciso desentrañó
la trampa de la identidad
y pregunta si esta mano
es su mano.

La entropía galopante
de los espejos
dice ya no eres un niño
y dice nadie se conoce
puesto que el sí mismo
no es un dato positivo:
carne y tiempo
y nada más.



CUATRO

Tan sólo el frío
tantas veces presentido,
son del aullido
y arañazo del viento,
soplo del viento
que destrozará el cristal,
termodinámica implacable
de la materia y de la vida,
de la vida y nada más,
flecha que conduce
hacia el frío final



CINCO

El azul del cielo no acaba en ningún
lugar conocido por el hombre y
su silencioso estrépito llama
a tu ventana con manos cansadas:
pronto vendrá la noche a alzarse
magnánima, fría y susurrante,
suave brisa y cántico, retórica
de la pequeña desmayada muerte,
suave abismo en que abandonarse



SEIS

Por la tarde fumo
y respiro
y miro
por la ventana
y poco más.
A veces
escucho música.
Música pop.
Me apetecería
tomar una cerveza.
Cascadas
de espuma
fresca
recorriendo
la garganta
y bañando
el cerebro.
Después
veré la tele
y cenaré
y leeré un poco
antes de dormir
y me dormiré
y poco más.



SIETE

Llueve sobre los muertos y llueve sobre los vivos y llueve por la tarde y llueve por la noche y llueve cuando hace frío y llueve cuando hace calor y llueve cuando te recuerdo y llueve cuando te olvido y llueve cuando estoy feliz y llueve cuando estoy triste y llueve cuando entro y llueve cuando salgo y llueve cuando duermo y llueve cuando despierto y llueve y llueve y no para de llover una lluvia que no existe pero que no para de caer y cae sobre lo vivos y cae sobre los muertos y cae por la noche y cae por la tarde y cae cuando hace calor y cae cuando hace frío.



OCHO

Nadie sabe lo que puede un cuerpo.

Spinoza


Cuerpo es lo que somos
cuerpos que buscan otros cuerpos
que se abisman en la noche de los cuerpos
que huyen de otros cuerpos
que se beben otros cuerpos,
cuerpos poseídos, felices, desdichados,
cuerpos que se encuentran
ecos de cuerpos cálidos
cuerpos ateridos de frío
cuerpos que no se encuentran,
geometría borrosa de los cuerpos
cuerpos nocturnos, cuerpos diurnos,
cuerpos que actúan y padecen
cuerpos a la deriva por las ciudades
que navegan otros cuerpos
que se esconden en otros cuerpos,
cuerpos redondos, afilados, heridos,

y qué extraño ser un cuerpo
pues cuerpo es lo que somos
nadando sobre la nada.



NUEVE

Trazar círculos mágicos
con un lápiz
sobre el mundo
esferas
de movimiento
perpetuo
mundo mágico
lapices
de todos los colores
fulgor
invencible
resplandor
del rayo
música
vibrante
de las esferas
aligerando
el peso del mundo
líneas
de fuga
que escapan
inventan mundos
que te llevan
de viaje
por el mundo
cuerpo extendido
campo ampliado
de la percepción
penetrante
claro
del bosque
respiración
infinita.

domingo, 11 de abril de 2010

El estilo en filosofía

El estilo, en filosofía, tiende hacia estos tres polos: el concepto (nuevas maneras de pensar), el percepto (nuevas maneras de ver y escuchar) y el afecto (nuevas maneras de experimentar). Tal es la trinidad filosófica, la filosofía como ópera: se necesitan las tres para que el movimiento tenga lugar.

Gilles Deleuze

viernes, 9 de abril de 2010

Spinozismo en acción

Cuanto más feliz me siento, mejor juego.

Messi.


Y es que los afectos positivos favorecen nuestra potencia de obrar.

martes, 6 de abril de 2010

El estalinista metafísico

Así llama Ignacio Castro Rey a Haneke. Desde aquí le aplaudo entusiasmado y finalizo el post al estilo Homer Simpson: fastídiate Haneke.

jueves, 1 de abril de 2010

El Diario del escritor insufrible

Estoy escribiendo. Leí a Vila-Matas. Eso fue el tro día. Ahora escribo. Miro por la ventana. A veces doy paseos. Como Walser. No siempre. Me siento aquí, como dijo Kafka. Kafka también se sentaba. Imagino que mi memoria está habitada. Por fantasmas. Los fantasmas son Walser y Kafka. Ayer me picó un huevo. Me rasqué. Esto lo escribió en su diario un escritor alemán. Lo cito aquí. Quienes no citan están condenados a no ser originales. Imaginen un libro de citas. Que original. Me llamo Erik Satie. Como todo el mundo. Soy el fantasma de Vila-Matas. Sueño que soy el fantasma de Vila-Matas. Podría tener sueños eróticos. Pero no. A mí sólo me ponen las citas. Las literarias, quiero decir. Miren que sintaxis más original tengo. Ni Beckett. Que caos. Qué estaba escribiendo. Escribo que escribo. Paradojas. Regresiones infinitas. Paseo sin rumbo. Escribo sin rumbo. Sin rumbo narrativo. Oh que raro soy. Mirad que coqueto soy. Y que sintaxis. No se olviden de apreciar las sintaxis. Nadie innova si no es escribiendo así. Como si fuera un telegrama. Stop. Perdón por la autorreferencialidad. No existe la metaliteratura. No se preocupen por eso. Lo dijeron los lógicos. Que no hay metalenguaje. Aunque yo no tengo ni puta idea de lógica. Pero lo leí. Es una cita. Me gustan los escritores. Me gustan tanto que prefiero imaginar sus rostros. Imaginar cómo eran. Cualquier gilipollez. Con tal de no leerles. Me sé nombres de miles de escritores. Es tan genial. No sé por qué estas palabras a cuden a mi mente. Quizá es porque soy un vago de mierda. Escribo así, que es más fácil. Con muchos puntos. Sin ideas. Pienso en el parche de Joyce. Sin ese parche jamás hubiese revolucionado la literatura. Todo se lo debe al parche. En Cela pienso poco. No es cool. Es tan castizo. Con Delibes me pasa lo mismo. No es nada cool: Azarías caga en cualquier parte. En lugar de soñar con escritores y citar. Que es lo más importante del mundo. Lo que hago yo. Por eso soy genial. Salí a la calle temprano, como escribió Blanchot. Blanchot salía a la calle. Tenía esa manía. Claro que se trataba de una calle literaria. Ahora me creo Blanchot. También salgo a la calle. Como hacía él. Mi vida está atravesada por la literatura. La literatura soy yo, parafraseando a Luis XIV. Un pie. Otro pie. Y qué más decir. Decir que digo. Decir que digo que digo. Así ab aeterno. Amo tanto la literatura...